¿Soy hipocondriaco?

La hipocondría es una de las maneras en las que nuestro cuerpo expresa la ansiedad. Los síntomas hipocondriacos se caracterizan por una preocupación excesiva por la salud y la interpretación errónea de sensaciones corporales normales como signos de enfermedad grave.

Cuando esto aparece la persona no inventa un dolor/ un malestar, la persona percibe una señal corporal real que interpreta como signo de enfermedad. Cuando tenemos miedo los sentidos se agudizan por lo que cualquier señal va a ser atendida y nada pasará desapercibido.

Ante esto puedes estar constantemente preocupado por tu salud y convencido de que estas enfermo. Aparece una tendencia a buscar información médica de forma compulsiva. Por eso, puedes estar en constante estado de alerta.

Cuando las personas que sufren síntomas hipocondriacos van al médico se quedan tranquilos por un tiempo pero pronto les atrapa de nuevo la preocupación.

La psicología juega un papel importante en el tratamiento de la hipocondría, ya que se enfoca en cambiar las creencias y comportamientos que mantienen este patrón de pensamiento.Cuando algo nos asusta, tendemos a prestar más atención al estímulo temido y la emoción se percibe de manera más intensa llegando incluso a paralizarnos. Son sensaciones muy desagradables que pueden despertar el miedo al propio miedo.

¿Cuál es la intervención?

Los síntomas no aparecen como un elemento aislado y debemos entenderlos dentro de un contexto. Los síntomas hipocondriacos son un indicativo de que algo no marcha bien. Es importante entender la “función” que están teniendo en nosotros en este momento ¿mi cuerpo me está parando?, ¿estoy pidiendo ayuda?, ¿han sucedido otras cosas que me ponen alerta?,etc.

El tratamiento se centra en la comprensión de las causas que nos están generando ese malestar y entender la interrelación que está haciendo que se mantenga.